No podíamos perder esta marca familiar a la que tanto esfuerzo y tiempo hemos dedicado hasta convertirla en una de las mejores pastelerías de Canarias. Y consideramos que regresar a los inicios también es avanzar. Ahora el público y la clientela que nos ha seguido durante todos pueden conocer el lugar donde empezó todo.
Nuestro obrador familiar huele a pasteles y bizcochos recién horneados. Sobre nuestras mesas trabajamos cada uno de los productos con cariño y dedicación porque sabemos que hemos educado a nuestra clientela en la exigencia. Y ahora, con este despacho, van directamente del horno al expositor.
El concepto de la Neketan en esta nueva etapa es otro. Es la venta directa en un despacho que hemos decorado inspirados en las joyerías. Y es que cada pastel, cada pasta de té, cada teja, cada tarta y cada decoración lleva para nosotros la misma delicadeza que una joya para que sea disfrutada.
Por nuestro obrador familiar han pasado los mejores profesionales de la repostería del mundo, entre los que figuran Paco Torreblanca, Michel Willaume, Oriol Balaguer, Philip Urraca, Yann Duytsche, Toni Viñas y Javier Guillén, entre otros.
Queremos seguir estando en los momentos felices de la gente. Sabemos que muchas personas tienen en su memoria nuestros sabores, que se han quedado pegado en el paladar a sus recuerdos y trabajaremos para que siga siendo así.
Queremos dar las gracias a nuestro padre, Marcos Neketan Urbistondo, y a nuestra madre, Margarita Sanz López, por abrirnos las puertas, y a nuestro hermano Aitor Neketan por enseñarnos el camino. Nosotros continuaremos el trabajo orgullosos de esta familia que lleva el apellido de nuestro obrador.
Alexis y Arkaitz Neketan